Tigre, tigre, que te enciendes en luz por los bosques de la noche ¿qué mano inmortal, qué ojo pudo idear tu terrible simetría? ¿En qué profundidades distantes, en qué cielos ardió el fuego de tus ojos? ¿Con qué alas osó elevarse? ¿Qué mano osó tomar ese fuego?

El Tigre de Willian Blake

jueves, 3 de mayo de 2012

LA PERSISTENCIA DE LOS HUESOS

Esta pesistencia de los huesos me jode,
al igual que una explosión nuclear
en medio de una copa de vino,
esta insistencia me vuelve penoso
como un moco descuidado en la camisa,
¡tanto tiempo para hacer lo mismo!
Contar los pedos y las babas perdidas,
este empeño me hace divagar
hablar con dragones y venus amputadas,
¡y trabajar para idotas!
Esta firmeza, es la del fango... no lo ovido