Tigre, tigre, que te enciendes en luz por los bosques de la noche ¿qué mano inmortal, qué ojo pudo idear tu terrible simetría? ¿En qué profundidades distantes, en qué cielos ardió el fuego de tus ojos? ¿Con qué alas osó elevarse? ¿Qué mano osó tomar ese fuego?

El Tigre de Willian Blake

viernes, 15 de marzo de 2013

DESDE EL LUMINOSO INFIERNO

Desde el lumininoso infierno mi objetivo no es ser publicado sino más bien abrasar todo papel y vestigio,
                                     y también
es mi objetivo follarte hasta dentro,
                                                     ¡ángeles caídos! Hagan como que no vean, ¡por favor!
Desde el luminoso infierno puede que abra las puertas del incendio azulado
y me coma el sol mil veces viejo, (termonuclear sueño)
                                                  no soy romántico
soy autodestructivo
                             y huelo mal,
desde el luminoso infierno puede que sea el poeta atávico de los locos
así que me toca masturbarme con la blasfemia una vez más,
ya lo veo
ya lo veo
ya lo veo
ya lo veo
ya lo veo
ya lo veo como arde.         
                                   

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